MI EXPERIENCIA EN EL BISTRO – SANTA MARTA

Hace unos meses tuve la oportunidad de compartir en familia en una de las playas más agradables de Colombia. Aprovechando la cercanía y la facilidad de tomar un carro y trasladarse hasta Santa Marta fuimos a pasar el día (un sábado) a las playas de Bello Horizonte. El grupo lo conformamos mis padres, mi hermana, mi sobrina y mi esposa, hijos y yo. Pasamos un día muy agradable en la playa y ya al filo de las 4 pm decidimos irnos a almorzar por lo que nos cambiamos de ropa y bajamos a Santa Marta.

Llegamos buscando un restaurante de los más conocidos pero no pudieron atendernos ya que no tenían donde ubicarnos por el tamaño del grupo, así que decidimos recorrer caminando la calle peatonal donde está ubicado en pleno centro de Santa Marta. La calle peatonal del Parque de Los Novios tiene un variedad de restaurantes, heladerías, bares y se recorre rápidamente con un clima agradable. La vida plena la logra en horas del final de la tarde y la noche.

Mientras caminábamos íbamos entrando a varios de los restaurantes pero hubo uno que resaltó entre los demás y fue el que seleccionamos: El Bistro. Su ambiente es muy agradable y acogedor. No les importó que no era horario de atención y nos recibieron muy amablemente. Pedimos la carta y algo para tomar ya que el sol del día en la playa nos tenía algo deshidratados. La que nunca falta, la limonada, fue acompañada por el jugo de mandarina, la limonada de coco, jugo de fresa, gaseosa y agua embotellada. Los jugos muy buenos, con sabores bien definidos y muy buen punto de azúcar que permitía resaltar la acidez de cada uno.

Al ordenar los platos fuertes nos decidimos por cuatro diferentes platos. Mis padres optaron por el atún rojo, mi hermana pidió un sándwich de lomito y tomates confitados, mi sobrina y mi esposa por el pollo al pesto, mi hijo y yo optamos por algo que nunca creí que pediría junto al mar, la hamburguesa.

El atún llegó con una imponencia total y un sabor único resaltando lo fuerte de su carne con la suavidad de la salsa para darle un balance casi perfecto. El pollo al pesto se destacaba no sólo por su aroma sino que la salsa que le da el sabor particular estaba delicadamente inclinada a resaltar con pesto para imprimirle el toque de sabor y textura necesarios para una pechuga bien cortada, jugosa y suave. El sándwich de lomito y tomates era una verdadera explosión en el paladar al sentir las diferentes texturas de la carne y los vegetales y el choque de sabores de los tomates confitados con un dulce acentuado contrastando con el salado de la carne y el pan. Pero la reina fue la hamburguesa. Preparada de una forma artesanal y mezclando la carne de res con algunos otros ingredientes “secretos” hacen de esta una de las mejores hamburguesas que he podido disfrutar en Colombia. Sin lugar a dudas.

A la hora de los postres llegaron el creme brule y una tarta de manzana con helado de vainilla. Terminaron de complacernos el festín tan agradable que habíamos tenido con estos postres de muy buen sabor y punto de dulce que cumplieron su función en el paladar a total cabalidad.

Definitivamente un restaurante para recomendar y disfrutar en Santa Marta, en la calle peatonal del Parque de Los Novios Calle 19 No 3-68.